Descubrimos un limonero en el patio y nos emocionamos al convertirnos en pequeños exploradores. Los alumnos de infantil observamos sus hojas, sus ramas y sus formas, hasta que encontramos un árbol con tres limones.
Al principio no sabíamos cómo se llamaba. Dijimos varios nombres distintos, hasta que alguien exclamó con alegría: ¡es un limonero!
Nos llenamos de entusiasmo. Decidimos coger los limones para investigarlos, ya que eran diferentes: uno estaba más verde, otro era más grande y otro tenía un tono amarillito. ¿Cuál estaría ya maduro? Con mucho cuidado, los abrimos y descubrimos la respuesta.
Uno sí que estaba en su punto. Entonces nos atrevimos a probarlo. Antes nos preguntamos: ¿será dulce, ácido o amargo? Al probarlo, hicimos muchas muecas porque era muy ácido, pero nos pareció riquísimo.
Más tarde aprendimos la canción “Mi limón, mi limonero” y la cantamos todos juntos. La experiencia fue aún más divertida.
Nos encantó investigar y descubrir cosas nuevas. Ahora nos preguntamos: ¿darán frutos los demás árboles del patio? Estaremos muy atentos, porque seguro que nos esperan más sorpresas. 🌱✨
